En la noche espero a tu encuentro, mi caballero de la noche...
Mientras las agujas apuntan las doce... mi rostro hacia el firmamento, mirando con firmeza hasta que la luna de un toque de resplandor y belleza, espera tu beso con ansias.
Hoy deseo ser quien llene de pasión y locura tu ser, mientras la luna nos acompaña desde lo alto.
El vino tinto acompañando la velada, hace de los dos un pozo de palabras y emociones encontradas...
El beso en la mejilla es más que suficiente, pues sos mi amigo y fiel confidente; no hay necesidad de más, porque somos dos almas que vagan en la noche en busca de algo que jamás encuentran ni encontrarán.
Hoy necesito de ti, de tu abrazo y tu compañía, pues sos vos quien me acompaña desde lo lejos en los momentos que siempre lo necesito.
Amigo mío, eso sos y así quedaremos, pues aunque más que almas gemelas, así nos vemos... Amigo...
Hoy quiero ser quien te acompañe en tu fina, triste y amarga soledad, para que así la espera de ambos sea mas acogedora y por qué no, divertida también.
Querido poeta... hoy pensando en las nubes y el firmamento escribo esto para vos, porque es la verdad, porque no se que mas decir y porque espero ser tu amiga a pesar de los infortunios y las tormentas venideras...
No hay comentarios:
Publicar un comentario